La
teoría económica parte de un axioma fundamental: los humanos somos racionales. La
toma de decisiones “racional” dentro de la teoría económica supone que cada
persona decide de tal forma que maximiza su utilidad, que en economía es una
medida de la satisfacción. A menudo se asume que la satisfacción aumenta (o
disminuye) con el incremento (o disminución) del consumo de bienes y servicios,
de la riqueza y del tiempo libre. Cuando comparamos entre distintas
inversiones, se supone que si tomamos la decisión de invertir en una
alternativa concreta (por ejemplo, jugar a la lotería) es porque consideramos
que ésta nos otorgará el máximo beneficio esperado de todas ellas. Pero si esto
es así, ¿por qué jugamos a los juegos de azar?
viernes, 23 de diciembre de 2016
jueves, 15 de diciembre de 2016
DesBorda, un método manipulable y nada proporcional
El
Secretario de Organización de Podemos en España, Pablo Echenique, acaba de
proponer un nuevo sistema de votación, que denomina Desborda, para el próximo
Congreso Nacional de Podemos, a celebrar en Vistalegre el próximo mes de febrero.
En esta entrada sostengo que el método Desborda de votación es manipulable y nada proporcional, y que probablemente eso es lo que se pretende.
lunes, 12 de diciembre de 2016
Voto útil
El grito que pusieron de moda las
movilizaciones sociales del 15M —“no nos representan”— ha dejado de ser el lema
de una minoría para pasar a expresar un sentimiento mayoritario. De hecho, la
abrumadora mayoría de los ciudadanos (83%) desaprueba la forma en que el
Congreso de los Diputados lleva a cabo su trabajo. Mi libro “Voto
útil: cómo elegir a nuestros políticos” propone reformas el procedimiento
de elección de representantes políticos y del sistema electoral del Congreso de
los Diputados para solucionar la evidente crisis de representatividad y
legitimidad existente en nuestro sistema democrático.
miércoles, 7 de diciembre de 2016
¡No pique!
Cuando se aproxima el final de
cada año las entidades financieras suelen dedicar sus esfuerzos a captar
inversiones para sus planes de pensiones al grito de que “así pagará menos
impuestos”. A sus ventajas fiscales suelen unir regalos: televisores, bonificaciones
en metálico, o cacharrería variada en artículos de cocina. Estos regalos en
realidad van a cargo de unas altas comisiones de gestión, restando así potencial
a la revalorización de las carteras a largo plazo, que es lo que se supone
debería primar en un plan de ahorro a largo plazo. Para los que ya han recibido
la llamada de su entidad financiera, un consejo: ¡No pique! Con su ventajosa
fiscalidad le están lanzando un anzuelo. Una vez haga su aportación, ese dinero
permanecerá inalcanzable hasta su jubilación, y entonces deberá pagar lo que
hoy no ha hecho. Y no son pocos los casos en los que se termina pagando en el
momento del cobro más impuestos de los que se ahorraron en el de la aportación.